Itinerario
Día 1: Ámsterdam – Embarque.
Día 2: Ámsterdam. Todos tenemos una imagen de Ámsterdam. Para algunos, el encanto de Ámsterdam reside en sus pequeñas embarcaciones que navegan plácidamente por los canales y trabajadores que circulan en bicicleta para ir al trabajo y, en numerosas ocasiones, se encuentran con amigos para tomar una copa. Para otros, Ámsterdam son edificios a dos aguas inclinados, aparentemente precariamente, sobre calles adoquinadas y acogedoras tabernas iluminadas por velas. Otros imaginan tulipanes en flor y las pinturas Vermeer, Van Gogh y Rembrandt. Cada visión es aún más seductora cuando se experimenta en persona.
Día 3: Düsseldorf. Ciudad cuya historia se remonta a los siglos VII y VIII, pero su faceta artística de vanguardia e innovador panorama empresarial la hacen aún más impresionante. Düsseldorf es elegante, ligada a la moda y al diseño, unida a una gastronomía y vida nocturna únicas de gran prestigio internacional. El mundo de la banca y tecnología han aportado una gran riqueza a la ciudad, convirtiéndola en una de las ciudades más pobladas del mundo.
Día 4: Coblenza. Ubicada en el lugar donde se unen los ríos Rin y Mosela entre tres cadenas montañosas, esto hace que el paisaje de Coblenza sea inigualable. Además hay que añadirle su riqueza histórica con 2.000 de antigüedad, la fortaleza en la cima de una colina y las plazas bordeadas por la arquitectura germánica clásica, un lugar óptimo para tomar las mejores fotografías para el recuerdo. Paseando por los estrechos senderos y el paseo fluvial de la ciudad, puede encontrarse con iglesias medievales, parques llenos de flores, cafés en las aceras y tal vez un weinstube o una taberna de vinos, ideal para beber su célebre vino Riesling.
Día 5: Bernkastel. Colorida ciudad medieval bien conservada, cuya Plaza del Mercado se encuentra entre las más auténticas y encantadoras próximas al río, su ayuntamiento es de la época del Renacimiento y en las calles están llenas de vida con sus tiendas y cafés. No se pierda la oportunidad de conocer Spitzhaüschen (casa puntiaguda) que destaca por su altura. Con sus plantas bajas más estrechas que las plantas superiores, el edificio parece tambalearse, pero se ha mantenido fuerte e imponente desde 1416.
Día 6 y 7: Tréveris. La ciudad más antigua de Alemania fue fundada por los romanos y todavía conserva gran parte de su cultura: baños romanos, anfiteatro y la imponente Porta Nigra. Desde entonces, Tréveris, es conocida internacionalmente por su bello paisaje de viñedos a orillas del Mosela, con el imponente Castillo del Eltz del siglo XII que custodia la ciudad.
Día 8: Cochem. Ciudad llena de edificios de entramado de madera, pendientes empinadas en terrazas, viñedos exuberantes y un pintoresco castillo con vistas al río Mosela, el encantador paseo junto al río de Cochem ofrece la oportunidad de disfrutar de un ambiente propio de un cuento de hadas, que cobra vida. Contemple la belleza de las colinas circundantes, en ocasiones cubiertas de niebla, y observe cómo las aguas tranquilas del río cruzan los puentes que atraviesan la ciudad.
Día 9: Bonn. Con su hermoso entorno junto al río, Bonn todavía se considera la segunda capital no oficial de la Alemania reunificada, hogar de varias operaciones gubernamentales, así como de más de 20 instituciones de las Naciones Unidas. Fundada por romanos, fue la antigua capital del Electorado de Colonia y la mayor fortaleza romana conocida. Su vecino ilustre, Ludwig van Beethoven, cumple 250 años en 2020, por lo que la emoción es notable en el ambiente.
Día 10: Arnhem. La belleza de Arnhem es sin precedente. No es ningún misterio, dada su belleza natural, abundantes parques y senderos para bicicletas, y la animada vida de la ciudad gracias a sus cafés y centros creativos. La etapa más oscura de la ciudad llegó durante la Segunda Guerra Mundial, cuando los nazis invadieron los Países Bajos, ocupando todo el país en una semana. Como resistencia, Arnhem se convirtió en el sitio de la operación militar aerotransportada más grande de la historia. Hoy, esta ciudad es conocida como un centro de moda y diseño.
Día 11: Ámsterdam - Desembarque. Todos tenemos una imagen de Ámsterdam. Para algunos, el encanto de Ámsterdam reside en sus pequeñas embarcaciones que navegan plácidamente por los canales y trabajadores que circulan en bicicleta para ir al trabajo y, en numerosas ocasiones, se encuentran con amigos para tomar una copa. Para otros, Ámsterdam son edificios a dos aguas inclinados, aparentemente precariamente, sobre calles adoquinadas y acogedoras tabernas iluminadas por velas. Otros imaginan tulipanes en flor y las pinturas Vermeer, Van Gogh y Rembrandt. Cada visión es aún más seductora cuando se experimenta en persona.